miércoles, 31 de octubre de 2007

Halloween


Halloween es una fiesta que no suele dar miedo a nadie. Lo que asusta realmente de ella son los recuerdos que trae. Porque es una fiesta sobre los que no estan y los que no estan y empeñan en quedarse.


Es por ello que días como este me acuerdo de como me reía de la gente que se disfrazaba de siniestro de "oferta"en plan "me ha quedado muy bien"... las telas de tu disfraz de los chinos no te configuran el aspecto tan tétrico que precisas...


Y me acuerdo del amor de esos días y de la soledad de este. En mucho tiempo va a ser mi primer Halloween sola, sin la persona a la que amaba. Eso sí que da miedo.


A pesar de eso, me vestiré normal para mi, disfrazada para el resto y saldré a ver si encuentro sangre con la que realizar mis rituales taumatúrgicos.


Feliz noche a todos. Que no os den muchas calabazas...

viernes, 19 de octubre de 2007

Sueños


Tras mucho tiempo alejada del universo blogero vuelvo. Sé que no será la primera ni la última vez que lo haga, porque soy así de vaga, de inconstante y porque lo que menos me apetece es pasarme la vida ante la pantalla de un ordenador.


Echo de menos los días nublados, me encataría estar en Valencia, ellos tienen los días que pegan conmigo, bueno, más bien con mi estado anímico actual.Ya van cayendo las primeras hojas de los árboles, lo cual es un consuelo.


Mirando el sol por la ventana de mi cuarto que ha venido a despertarme feliz, antes de desearle que se pudriera en la inmensidad de los infiernos, he estado pensando en lo que me dijo H sobre convertirse en junco cuando el mundo se desmorona, doblarte sin ceder. Tu languideces por un beso, pero no puedes derrumbarte, porque no soluciona nada.


Paseo por la facultad como un ánima, sé que nadie se percata de mi presencia cuando voy por la calle, casi mejor que nadie me mire... el día que alguien me mire es posible que quiera mirarle y que me rompa como astilla seca.


Quiero perderme en la inmensidad de unos brazos que me añoren, en la profundidad de unos ojos que me deseen, en los labios de alguien que quiera tocar mi blanda piel con ellos y no tocar ninguna otra.


Quiero ser el sueño de la persona con la que yo quiera soñar.